"En mi corazón he guardado mis dichos, para no pecar contra ti" Salmo 119:11
La meditación Santa, no tiene que ver con vaciar la mente, sino que con llenarla con Su palabra.
Los abuelos de una amiga tenían una granja con muchas vacas. Todo lo que ellas hacían durante el día entero, era comer. Me alegra saber que no soy una vaca! Pasan todo su tiempo dando vueltas, siendo feas, oliendo mal y espantando las moscas con la cola (y tú pensabas que tu vida era aburrida!).
Hay una cosa, sin embargo, sobre una vaca que debes desear para ti mismo. Es la forma en que comen! ¿Sabías que las vacas tienen varios estómagos? La vaca mastica su comida, traga, y luego la trae de nuevo a la boca, mastica, traga, etc. Esto se llama "el proceso de masticar su propio bolo alimenticio".
No estoy recomendando que lo hagas (es probable que te quedes sin muchos amigos si lo haces), pero debes poner este principio en práctica espiritual!
Al leer la Biblia o escuchar una prédica, terminamos por olvidar -tarde o temprano- el contenido.Por eso hacemos referencia a "traerlo de nuevo y masticarlo varias veces". Piensa en ello! La Biblia llama a esto "la meditación". Salmo 01:02 dice: - "Pero su delicia está en la ley de Jehová, y en su ley medita de día y de noche"
La Palabra de Dios tiene un significado mucho más profundo cuando te tomas el tiempo para pensar realmente en su mensaje. El mundo lo sabe, por eso se muestran los mismos anuncios comerciales una y otra vez.
La repetición es todavía la clave para el aprendizaje. Necesitamos que se nos recuerde una y otra vez las verdades de la Palabra de Dios para que podamos mantener una vida llena del Espíritu Santo y fructífera.
Todos tenemos una tendencia a olvidar: 83 % de nosotros olvida el nombre de alguien después de oírlo.
60 % de la población general se olvida de dónde dejaron algo, 57 % olvidamos los números de teléfono que ya habíamos aprendido. Como Cristianos, ¿cuán a menudo nos olvidamos de las verdades de Dios y lo que Él ha hecho por nosotros en el pasado? Debemos hacer un esfuerzo deliberado para reflexionar sobre lo que hemos oído y visto a Dios hacer! Esto se hace mediante la meditación de la Palabra y las obras de Dios! Al hacer esto, verás que Dios realmente te habla, espera y quiere cuidarte.
Su provisión y fidelidad serán parte de una realidad, que nos hace valientes para enfrentarnos a las circunstancias actuales.
La Biblia fue escrita para todo el mundo, y también fue escrita para ti a nivel personal. Dios tiene un mensaje para ti y, a veces, sólo se recibe cuando vas más despacio y actuamos como una vaca! Así que toma un poco de tiempo extra para memorizar, meditar y aprender lo que la Biblia tiene que decir!
PD: no debemos ser vacas en el sentido chileno... por ejemplo, "más pesado/a que vaca en brazos" ni "fue super vaca con su hermano"...
Has memorizado versículos bíblicos? Cuáles? Con qué propósito?
Agenda un espacio de tu tiempo para reflexionar acerca de las bondades de Dios o cómo está tu relación con él, también puedes dedicarte a reflexionar en un versículo específico o por qué no, todo un capítulo.
A qué nos alienta el Salmo 77:11?
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