Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores;
Unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando.
Salmo 23:5
David había aprendido temprano en su vida, que Dios lo protegería . En su juventud , se enfrentó a Goliat sin temor, porque Dios ya había salvado a su rebaño de ovejas del león y el oso. Sigo pensando que esta es una de mis historias favoritas de la Biblia! Como adulto, David continuó enfrentando peligros y los ataques de sus enemigos. Al leer el Salmo 23 , nos consuela saber que nuestro pastor está cuidando de nosotros.
Por hacer el bien y ser rectos, tendremos enemigos , tal como le pasó a David . Esos enemigos tratan de vencernos, robar nuestra alegría y llevarnos hacia abajo. Sin embargo, como cristianos, si nos limitáramos a seguir caminando con nuestro pastor, de la mano de Jesús, no tienen ningún poder sobre nosotros. No sólo eso, sino que el Señor nos sigue bendiciendo delante de ellos !
Qué frustrante debe ser para nuestros enemigos ver la provisión de Dios y el cuidado de Él para con nosotros, cuando están tratando de arruinarnos! No necesitamos preocuparnos acerca de los que tratan de destruirnos cuando estamos siguiendo de cerca a Dios . Él es un protector de la vida de sus ovejas y Él nos hará justicia frente a nuestros enemigos. A pesar de que pueden hacer nuestras vidas miserables, Dios nos sigue bendiciendo y derrama su bondad en abundancia!
Hay muchas oraciones de David acerca de sus enemigos . ¿Las has leído? Usted puede sentir sus propias emociones y frustraciones relacionadas con los sentimientos de David en la oración. Y, sin embargo , David tiene paz en el final. Él siempre termina con la mirada hacia su Dios, con la seguridad de que el Señor lo ama y se hará cargo de él. Había experimentado la fidelidad de Dios . Había visto a sus enemigos desistir cuando él y sus hombres fueron repletos con la honra y los bienes de la victoria!
Como lo hizo David , sigan orando por sus enemigos. Aunque creamos que es injusto, Dios tiene una perspectiva mayor a la nuestra para ver las circunstancias y el propósito de ellas. Recuerda que Él tiene planes para nosotros, planes que no son de calamidad sino para darnos vida y un propósito. Recuerda que su voluntad es perfecta.
Los adversarios van y vienen, pero recuerda que la victoria es tuya por el gran poder de Dios y el amor por sus ovejas. Realmente no importa quién está en contra de nosotros, sino que Dios está de nuestro lado! Sigue haciendo el bien. Nuestros enemigos ven. Saben, en el fondo, que no pueden ganar.
Todo está bien. Dios continúa bendiciendo y cuidando a los que están cerca de él. Él nos ha ungido con gracia y un bálsamo para nuestras mentes. No hay miedo en su presencia. Mientras que nuestros enemigos se lamentan en la frustración, nosotros estamos bien.
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